El Coro de la Recoleta
Alrededor del año 1679 se concluyó este coro de madera para la iglesia de San Francisco de Sucre; su contratista, Juan Jiménez de Villarroel (español), contando con la ayuda de oficiales y nativos, llevó a cabo, con éxito, su construcción. Hoy está ubicado en la Recoleta con todo el esplendor del estilo barroco florido, representado por las estatuillas talladas en honor de los franciscanos inmolados en el Japón (Nagasaki) en el año 1597, y otros.
Es una obra única y de valor artístico incalculable.
El Coro de la Compañía De Jesús
Este coro tallado íntegramente a mano y dorado con panes de oro, expresa, por sí mismo, mucho más que las palabras.
Perteneció a la capilla privada de la Compañía de Jesús y está colocado en el mismo sitio de antes, es decir, encima de la puerta de entrada a la Sala de la Libertad.
Verdaderamente, en la ciudad de Sucre hay innumerables reliquias de valor artístico y monetario sin precedentes, que forman parte de los mayores tesoros de Bolivia.
